SOL GUADALMAR, Málaga

Mi estadía en Sol Guadalmar fue una mezcla de emociones. Al principio, la llegada fue complicada porque había poca personal y se notaba la falta de apoyo, lo cual afectó el check-in. Sin embargo, una vez que me instalaron en mi habitación limpia y espaciosa, la experiencia mejoró notablemente. La cercanía a la playa y las deliciosas comidas del buffet hicieron que, a pesar de los inconvenientes iniciales, mi vacaciones resultaran encantadoras.

Mi estancia en Sol Guadalmar fue bastante agradable. La ubicación es perfecta, cerca de la playa y en una zona tranquila. Las habitaciones son cómodas, aunque encontré algunos pequeños detalles que podrían mejorar la experiencia, como las almohadas y un poco de limpieza extra en la habitación. El servicio fue excelente, especialmente el personal del restaurante y de recepción, siempre dispuestos a ayudar.

Mi estancia en Sol Guadalmar fue bastante satisfactoria en general. La ubicación cerca de la playa es impresionante, lo que facilita disfrutar del sol y la brisa marina. Sin embargo, la calidad de la comida dejó un poco que desear y el ruido en el hotel podía ser incómodo en ocasiones.

Disfruté bastante de mi estancia en Sol Guadalmar, especialmente por la cercanía a la playa y la calidad de la comida que servían. Sin embargo, el ruido constante de las puertas al cerrarse fue un verdadero problema para dormir. A pesar de eso, el personal era muy amable y brindaba un buen servicio.

Me alojé en el hotel por 5 noches y fue un lugar genial para relajarse. La ubicación en la playa y el acceso fácil al agua son definitivamente puntos a favor. Sin embargo, la falta de entretenimiento por la noche y algunas pequeñas y viejas deficiencias en la habitación opacaron un poco mi experiencia general.